Publicado
en:
Parte
I Periódico El Supremo Nº 490 - 19-06-1998
Parte
II Periódico El Supremo Nº 492 - 27-06-1998
Parte III Periódico El
Supremo Nº 493 - 04-07-1998
Parte IV Periódico El
Supremo Nº 494 - 07-07-1998
Folleto editado por la Prefectura
Diamante para el acontecimiento 04-07-1998
Libro - Historia de Diamante y sus
Instituciones
*****
El 4 de julio de 1998 se celebra el 150º
aniversario de la habilitación del puerto de la ciudad de Diamante, en la
provincia de Entre Ríos, sobre la margen izquierda del río Paraná, a la altura
del Km. 533. También esa fecha, la Prefectura Naval Argentina la considera como
de creación de la hoy Subprefectura de la misma ciudad, reconociendo como su
primer jefe al capitán Martín José Ruiz Moreno.
Trataré de recrear en una apretada
síntesis su evolución, haciendo hincapié principalmente en la documentación
referida a los primeros años de existencia del puerto, el resguardo y la gente
que allí cumplió tareas, a modo de homenaje a sus pioneros, como así también
los hitos más salientes.
Al recorrer la historia de estas
tierras, nos muestra que naturalmente la zona fue apropiada por sus características
para uso portuario. Lo que es el Puerto Viejo y el hoy Puerto Nuevo, se conocía
como Punta Gorda, que al decir del profesor Juan José Antonio Segura “Era conocida la porción de tierra firme
entrerriana que penetra en el río Paraná desde la desembocadura o
"barra" del arroyo Ensenada y se extiende por unos 6 Km. hasta el arroyo Azotea.
Esta especie de cabo sin punta "mocho" o curvo fue lo que provocó
denominación de tan antiguo conocida”. Puede observarse que era incluida en
la cartografía llevada a cabo a partir de 1703 por distintos navegantes y
también las confeccionadas por los jesuitas.
Mientras que 10 Km. más al Sur, continúa
Segura “Desemboca el arroyo de "La
Manga" y frente a esta desembocadura, a la parte estrecha del río Paraná
que corre entre ella y la isla de enfrente, se la denominaba "Paso del
Rey" o "de la Manga", y
era el lugar utilizado para cruzar en esa época el río”; ruta obligada de
Santa Fe a Entre Ríos por la existencia de numerosas islas, que permitían el
fácil cruce del río, siempre que no estuviera crecido.
Las primeras operaciones de descarga
que encuentro documentadas, son desde enero a abril de 1813, al instalarse las
Baterías de Punta Gorda, no sólo es desembarcado armamento, municiones y parte
del personal, sino también materiales para la construcción de las baterías y
del reducto.
La ciudad de Diamante, fue fundada en
el citado paraje Punta Gorda el 27 de febrero de 1836 por decreto del
gobernador Echagüe, sobre la base de la población que se fue formando con las
familias de soldados que en distintas épocas fueron partes de las nombradas
baterías, como de la compañía de milicias que tuvo su asiento en el lugar, de
ahí que las primeras autoridades que ejercieron el mando del pueblo fueron
integrantes de éstas: por unos días, el teniente Marcos Cuello, que hacía de
Comisionado desde junio de 1832, y, el 11 de marzo de 1836, el gobierno de la
Provincia designa en su relevo al capitán Pablo Muñoz.(1) También se
sumó gente de Santa Fe y Buenos Aires, que formaron pequeños emprendimientos
rurales como también comenzaron actividades comerciales y de oficios. A esta
incipiente población, se sumaron indígenas guaraníes traídos desde Mandisoví en
1832, en número de 99.
Este punto fue testigo de hechos tales
como el de julio de 1840, cuando el general Lavalle cruzó el río Paraná por
Punta Gorda, después de la derrota de Sauce Grande, estando la escuadra
francesa esperándolo fondeada en el lugar.
Observando su importancia estratégica,
el 4 de julio de 1848,
el general Urquiza decidió una serie de nombramientos, que significaron la
transformación de Diamante pasando de ser un simple asentamiento a un pueblo
con instituciones organizadas, animándome a definir este momento como su
“segunda fundación”. Se nombró Receptor de Rentas a Manuel Agulla, como
Comandante Militar a Luis Hernández, Juez de Paz a Antonio Ríos, y, entre las
medidas tomadas, se habilitó el puerto de Diamante. Ese mismo 4 de julio de 1848,
por Acuerdo del Poder Ejecutivo Provincial firmado por el gobernador delegado
Antonio Crespo, se nombró al capitán de caballería Martín José Ruiz Moreno como
Capitán del Puerto y Cabo de Rentas del pueblo del Diamante. (2)
El Decreto de la habilitación oficial
sobre el puerto, fue impresa en la Imprenta del Estado en Paraná, Urquiza lo
firmó, estando fechada en el cuartel general en Gualeguaychú, que expresaba:
“Habilitando el Puerto del Diamante para la introducción y extracción.
El Gobernador y Capitán General de la
Provincia ha acordado y decreta:
Art. 1º. Queda habilitado el Puerto del
Pueblo del Diamante para introducción y extracción como están los demás de la
Provincia.
Art. 2º. Comuníquese a quienes
corresponda, e insértese en el Federal Entre-Riano.
JUSTO J. DE
URQUIZA.” (3)
Esta noticia fue publicada, como había
sido dispuesto, en el periódico de Paraná “El Federal Entre-Riano” en su
ejemplar Nº 249, encontrándose ubicada en su primer página. (4)
Al otro día, el gobernador delegado Antonio
Crespo, le escribió al general Urquiza desde Paraná, refiriéndole: "Mi querido amigo: he recibido las dos
amables de fecha 23 y 24 de junio ppdo. Con concepto a la primera he girado el
decreto que en ella me ordena habilitar el puerto del pueblo del Diamante, del
que incluyo 25 ejemplares.
Hoy
mismo se despachan los nombramientos de Comandante, Administrador de Rentas y
Capitán de Puerto en las personas del Sargento Mayor don Luis Hernández, don
Manuel Agulla y don Martín Ruiz Moreno". (5)
En la práctica, recién en setiembre
comenzó a funcionar la Receptoría, pues en una nota fechada el 25 de agosto de 1848,
firmada por el designado Agulla desde Paraná, informó al ministro tesorero
general de hacienda Vicente del Castillo, que antes de pasar a instalar la residencia en el pueblo del
Diamante, debía proveyerse de algunos
útiles. (6)
Al mes siguiente, comenzaron los
registros. El 3 de octubre, Agulla le informó al Ministro: “He recibido los útiles que he pedido para la oficina, si quedó algo
que lo envíen en algunas de las carretas que mando para conducir mi
familia". (7)
También otros detalles domésticos
inquietaban a los nuevos funcionarios, como que el 3 de enero de 1849, Agulla le
solicitó al Ministro: "saber
resolución sobre sueldos, pues la tardanza me impide dar principio a mi
casita". (8)
Durante el año 1848, no he localizado
documentación sobre las operaciones realizadas desde el mismo puerto, pero sí,
era administrativamente controlado e incluido en los registros de la Receptoría
de Rentas. Por ejemplo, puede observarse entre otras anotaciones, la realizada
el 9 de diciembre, donde en una nota del receptor Agulla al ministro Vicente
del Castillo, expresaba: "Que
estando próximo a llegar a este Puerto, los tirantes que el Exmo. Gobierno,
creo, encargó para la iglesia que va a construirse en este pueblo, espero se
digne decirme si debo proceder con respecto a este cargamento, como lo está
ordenado para los particulares”. (9)
A partir de febrero de 1849, se
comenzaron a llevar dos libros de registros en el Puerto: Uno de importación de
cargamentos o de descargas de buques y el otro de exportación o de carga.
El primero comenzó su primer registro
el 2 de enero: “Dn. Domingo Madolell
descargó de la lancha de un buque qe ba de tráncito pa
abajo con procedencia de Santa Fe, lo siguiente: 20 piezas de madera pa
umbrales, 10 orcones de ñandubay, 1 poste de esquina, 6 cañas tacuaras, 1
barrica de 5 @ javon, 1 cajoncito con 2 @ almidon. Firmado Ruiz Moreno”. El segundo lo hace con fecha 10 de febrero: “Dn. Miguel Palma cargó en la goleta Joven
Rocita con destino a Gualeguaychú, su Patrón el mismo cargando lo siguiente:
950 sandías y 12 zapallos. Firmado Ruiz
Moreno.” (10)
El 15 de marzo, en una nota del
Receptor al Ministro, adjuntó la cuenta de la compra del género para dos
banderas, una para la Comandancia y otra para la Capitanía del Puerto. (11)
Al comenzar el año financiero 1850,
Ruiz Moreno realizó la apertura de un nuevo libro, titulado Libro de Anclajes,
siendo el primer asiento con fecha 31 de marzo, registrando la salida con
destino a Buenos Aires de la balandra nacional Celidonia, anotando su porte y
tripulación. (12)
El 22 de julio, el comandante militar
Luis Hernández en nota al ministro Galán, le expresó: "Advirtiendo con frecuencia la escasez de un brazo auxiliar en la
Capitanía del Puerto, ya en carga o descarga de buques, para que éstos no
sufran demora en que puedan perjudicar a su negociación, como para el mayor
servicio público de aquel Departamento; así también preciso en la Comandancia
con el fin de prestar más actividades en el servicio, el infrascripto propone
al ciudadano federal don José Antonio Hernández, a quien por su conocida
honradez y buenas aptitudes que se le consideran puede desempeñar el empleo de
Dependiente del Resguardo y también ayudar en esta oficina sin interrupción de
sus deberes en aquel empleo".
Esto fue diligenciado en forma
favorable, contestando Galán que: "Ha
resuelto se nombre con esta fecha, Escribiente de la Comandancia Militar del
Diamante al ciudadano federal don José Antonio Hernández, con la dotación de $
25 mensuales, quien deber ser ocupado en el servicio del Resguardo del
Puerto y Policía cuando las circunstancias lo requieran". (13) El
sueldo del nombrado, fue liquidado como integrante de la comandancia.
Desde febrero de 1851, comenzó a
figurar en el Libro Mayor de la Receptoría, en los registros de pagos referente
al Departamento de Hacienda-Resguardo,
con el cargo de Dependiente del mismo, Dn. Fortunato Anzoategui con un
sueldo de $ 36 pesos mensuales, observándose durante todo ese año la misma
situación. (14)
Quiero rescatar como nota aclaratoria,
lo desarrollado por el Pref. Gral. Andrés René Rousseaux, autor de varios
trabajos sobre el tema, sobre las funciones de las Capitanías de Puerto y Comandancia
de Resguardos en la provincia de Entre Ríos, desde la puesta en vigencia
del “Reglamento del Orden Económico para
la Provincia de Entre Ríos” (1820-1821) dado
en Paraná por el general Francisco Ramírez, en su art. 28, estableció: “Los
Receptores serán los Capitanes de Puerto, en los puertos donde sea mayor el
tráfico, y será nombrado por el Comandante bajo las “órdenes del Receptor”.
Esta norma, fue recogida y contemplada en el “Reglamento para los Puertos de la
Provincia” (Entre Ríos) aprobado por el gobernador Echagüe el 6 de abril de 1832,
disponiendo en su art. 1º: “la Capitanía
de Puerto y Comandancia del Resguardo, quedan desde esta fecha reducidas a un
solo empleo”. Ello motivó que los cargos recibieran la denominación de “Capitán
de Puerto y Comandante del Resguardo de (Puerto de asiento), debido que el
mismo funcionario “tenía a su cargo las funciones propias de Capitán de Puerto
(policía marítima) y las de los “Resguardos” (funciones aduaneras). Esta
dualidad de funciones, en la provincia de Entre Ríos, se mantuvo hasta la
“nacionalización de las Capitanías de Puerto por Decreto del 10 de noviembre de 1868.
Esta denominación - Capitán de Puerto y Comandante del Resguardo” o también
Cabo del Resguardo o Cabo de Rentas para los puertos de menor importancia,
donde no correspondía Capitán de Puerto - se aplicó en las provincias de Santa
Fe y Corrientes. (15)
En diciembre de 1851, el puerto de
Diamante y su zona, fueron testigos de una de las acciones que ha pasado a la
historia argentina: el cruce del río Paraná por el Ejército Grande, que
comandado por el general Urquiza, se dirigía a Caseros. Anclaron no sólo varios
barcos nacionales, sino también buques brasileños. El general Madariaga, a
cargo de esta operación, recibió una importante ayuda en la persona del capitán
del puerto Ruiz Moreno, quien dejó momentáneamente el cargo, se unió al
ejército en operaciones cumpliendo una descollante tarea, siguiendo con ellos
hasta la culminación de la campaña.
Posteriormente, figuraron durante 1852
como dependientes del Resguardo del Diamante, Fortunato Anzoategui y Manuel
Hernández. (16) A mediados de año se nombró a don Severo Seguí en
reemplazo de Manuel Hernández, teniendo asignado el mismo sueldo. (17)
Entre los meses de agosto y setiembre,
se desempeñó como Capitán interino del Puerto, el dependiente Anzoategui,
reintegrándose a sus funciones en octubre del año 1852, con un sueldo de $ 50
pesos mensuales. (18)
Una situación curiosa ocurre en mayo de
1853, cuando el Receptor de Rentas le hizo conocer a Galán: "Quedo instruido por la nota de ayer
que en virtud de la renuncia que ha hecho del empleo de Cabo de Rentas de ese
Resguardo don Martín Ruiz Moreno, el señor Gobernador ha tenido a bien nombrar
con esa fecha en forma interina para reemplazarlo al ciudadano don Benito
Pujato con el sueldo acordado a ese empleo". (19) Pero a
los pocos días, Agulla le comunicó al Ministro: "Adjunto carta que me ha presentado el Capitán don Martín Ruiz
Moreno para que V. S. se sirva imponer de ella. Igualmente participo a Ud. que
el Sr. Secretario de Campaña del Exmo. Sr. Gobernador y Capitán General de esta
Provincia en otra carta de fecha 13 ppdo. me comunica que S. E. ha dispuesto
que Moreno vuelva a desempeñar el empleo que antes tenía en este
Resguardo". (20)
Continuaron las comunicaciones entre
ambos, el 21 de junio Agulla informó: "En
cumplimiento de la Superior Disposición que me comunica por nota del 15 del
cte. hice saber al Cabo de Rentas Interino don Benito Pujato el cese de su
empleo que debe verificar el día 30 el actual, y al Capitán don Martín Ruiz
Moreno que vuelva a ejercer el empleo reemplazándolo el día 1º de julio
próximo". (21)
Ruiz Moreno mantendría el cargo hasta
fin de ese año.
Con respecto al primer Resguardo,
rescato una nota del 13
de enero de 1854, firmada por el entonces comandante militar del
departamento Marcos Cuesta, donde informó al ministro general de gobierno José
Miguel Galán: "Tengo el honor de
informar a S.S. que he instigado suficientemente hasta poder decir: que la casa
que sirve de casilla al Resguardo, es de propiedad de Dn. Martín Moreno pero el
terreno es del Estado, que fue construida en tiempo de la ex-comandancia de Dn.
Luis Hernández y que ha estado en su servicio actual al estado sin interés
ninguno; la localidad de la expresada, es de nueve varas de largo y cuatro y
media de ancho con una divisoria que hace dos piezas, con corredor, de estanteo
y pajiza, con vereda de madera todo en buen estado, que según tasación vale
doscientos cuatro pesos, que es cuánto puede informar a V.S. en obsequio de la
verdad". (22)
La ubicación de este primer puerto y el
resguardo, del cual no he localizado documento que acredite su exacta posición,
se puede determinar de acuerdo a un grabado de la época, que estaba donde hoy se conoce como Puerto Viejo, a pesar que
su fisonomía ha cambiado totalmente a causa de los derrumbes de las barrancas y
el cambio de la línea de la costa.
Por ordenanza para las Puertos y
Aduanas de la Confederación, el 22 de junio de 1854 se clasificó al Puerto y Aduana del Diamante
como de Tercera Clase, habilitándolo para el comercio exterior, para
operaciones determinadas por la Aduana de que dependen. (23)
En agosto de 1860, en la planilla de
los empleados y gastos de oficina del departamento del Diamante, en el rubro
Administración de Hacienda, se incluyó al dependiente del resguardo Federico
Vera, y el alquiler de la casa que se ocupa de casilla $ 3.- (24)
Por decreto del Gobierno Nacional, el 10 de noviembre de 1862
las Capitanías de Puertos y Subdelegaciones se nacionalizaron, designándose en
diciembre a Diamante como Subdelegación, dependiente de la Capitanía de Paraná(25),
situación que se mantuvo hasta marzo de 1864, cuando se la suprimió,
funcionando solamente como Resguardo de Puerto. (26)
Las corrientes de inmigrantes que
ocuparon la zona, principalmente españoles, italianos, suizos, austríacos,
alemanes del Volga, dedicándose a la agricultura y luego a actividades
industriales, crearon la necesidad de darle salida a los productos por el único
y mejor medio disponible en el momento: el puerto. Comenzó a partir de ese
momento una peregrinación de gestiones para que se construyeran instalaciones
adecuadas.
Como titular en el periódico “El
Telégrafo” de la ciudad de Gualeguaychú, en su edición del 29 de junio de 1879, se mencionaba: “Obras
en el Diamante - El Poder Ejecutivo de la Nación ha aprobado los planos
presentados por el ingeniero Naiailes para la construcción de un muelle en el
Diamante, habiéndose llamado a licitación para su ejecución”. (27)
Con fecha 15 de mayo de 1885, se creó la
Ayudantía Marítima del puerto de Diamante y se nombró el personal de la misma;
observándose incluida en el Presupuesto para 1886 aprobado por el Senado de la
Nación. (28)
La Cámara de Diputados de la Nación,
trató el 25 de octubre
de 1887 el proyecto de construcción de un muelle en el Diamante,
sobre una propuesta de los señores Gigena y Aguirre. Con extensión de 200 metros, paralelo a la orilla del mismo río,
uniendo dicho muelle a otro de 25
m. que penetraría en el río perpendicularmente al
primero. Esta disposición se explica por la naturaleza del terreno del puerto.
Proponían también construir dos galpones espaciosos y los guinches que fueran
necesarios para el manejo del mismo muelle. Fundamentaban que ese muelle era
muy necesario, pues las colonias del Diamante se desarrollaban de una manera
extraordinaria, al extremo que en ese año, habían producido en trigo más de 300
mil fanegas.
En la discusión del tema, intervino el
diputado Sabá Hernández, quien expresó en la sesión: “Este puerto del Diamante ha preocupado al Poder Ejecutivo desde hace 8
años, entiendo que hasta ahora han hecho viajar 3 o 4 veces a los ingenieros
del Departamento para hacer estudios, han proyectado puertos por todas partes,
pero hasta ahora no hay muelle en el Diamante”. (29)
Por Ley Nacional Nº 2249 del 23 de noviembre de 1887,
el Poder Ejecutivo mandó a construir en el puerto del Diamante, un muelle de 200 metros de longitud,
paralelo a la costa, el cual estaría unido a otro de 25 metros de longitud,
perpendicular a la misma; pudiéndose invertir en esta obra hasta $ 80.000.- (30)
Al año siguiente, se autorizó la
construcción de terraplenes y murallones, pero la provisión de los fondos
necesarios para cumplir esta Ley y las tramitaciones que impuso el proyecto de
estas obras no se realizaron hasta más adelante, cuando la producción de la
zona y el creciente movimiento de embarque registrado actualizó la necesidad de
las obras, pues los medios que ofrecía el lugar para realizar las operaciones
de cargas y descargas, eran indudablemente muy primitivas. Algunas firmas que
operaban tenían armados especies de pontones con tablones que permitían el
acceso. La firma Antonio Taquela y Cía., tenía un galpón de depósito en el
borde superior de la barranca, ingeniosamente había construido una canaleta por
la que deslizaban las cargas hasta los improvisados muelles, utilizada hasta
mayo de 1900, en que se derrumbó junto a una enorme masa de tierra sobre la
costa. (31)
Este sistema había solucionado unos de
los problemas que permanentemente habían preocupado a las autoridades
municipales: el estado de la bajada al puerto, que por el tipo de suelo, con
cualquier lluvia quedaba deteriorado, impidiendo que los carros, únicos medios
de transportes de esa época, se desplazaran con normalidad. Basta observar que
en diciembre de 1866, el Jefe Político del Departamento, en un párrafo de su
Memoria Anual, comentó: "La cuesta
del Puerto muy en mal estado, se hizo mejorar invirtiendo el producido de
multas a mediados del año, pero las frecuentes lluvias que ha habido después
han vuelto a destruirlas, se procuró por medio de una suscripción, buscar
recursos y no se encontraron; previniendo que por empeños particulares antes se
solicitó del Gobierno Nacional y que se ofreció atender la solicitud sin
conseguir que la Receptoría de Rentas pudiese formar el presupuesto, que a ella
pedían; hoy procurando encontrar algún camino con que mejorar se dirigió una
nota al Receptor, cuyas copias se adjuntan." Desde allí y por mucho
tiempo subsistió el inconveniente. (32)
También para ese entonces, la casa
Dreyfus Fréres y Cía. construyó galpones y edificios para establecer una
sucursal de exportación de cereales directamente a Europa. Para ello, llegó a
la ciudad el señor Root, representante de aquella sociedad, a firmar los
contratos para la construcción de los edificios.
A pesar de ello, el movimiento de
embarcaciones que ha quedado registrado en los cuadros estadísticos de la
época, muestra la importancia que adquiría este punto, y esto se debe a que era
salida para la producción del Departamento, principalmente de cereales y harinas.
Quiero aclarar, que todos estos
proyectos, como así las construcciones se efectuaron en lo que hoy conocemos
como Puerto Nuevo, ocupando una porción de terreno algo más al Sur de las
actuales instalaciones, teniéndose en cuenta que la Escuela Naval que se
instaló y el proyecto de construcción de su edificio durante 1888, “Que necesitan toda el área hasta el
Río Paraná y su frente no debe bajar de 400 m.” y “Dicen que los terrenos más apropiados que
se han encontrado son los correspondientes a las Mzas. 11, 12, 16 y 17, de allí
hasta la ribera”. Se discute en el Honorable Concejo Deliberante local y se
aprueba, aclarándose que la extensión es la siguiente: “Frente Norte: desde la ribera del río una línea al rumbo 53º E, 145 metros hasta el
borde de la barranca y de allí siguiendo el Boulevard de la zona de quintas al
rumbo Sur 78º E 160
metros....hasta la ribera y frente Oeste hasta el Río
Paraná y Arroyo Ensenada”. (33)
El 25 de octubre de 1888, el Presidente
de la Municipalidad puso en conocimiento del Honorable Concejo Deliberante, que
se había otorgado el 10 de octubre y por ante el escribano Miguel Mascaró, la
escritura de propiedad definitiva a favor del Gobierno Nacional de los terrenos
de la Escuela Naval, compuesto por los expropiados a Dña. Josefina Black de
Farnesi, a Dn. Leopoldo Mayer y Cía., ocupándose una parte de propiedad
municipal, mientras que el doctor Sabá Z. Hernández donó parte de su quinta para
ese fin. (34)
Se aprovechó a la vez, para establecer
los terrenos a expropiarse para las estaciones de los ramales del Ferrocarril
Entre-Riano. (35)
En
enero de 1889 comenzó el traslado de la Escuela, y el alojamiento provisorio
del personal se realizó en un galpón que existía en el puerto, construido por la firma Leopoldo
Mayer y Cía. Funcionaría el Instituto hasta el año siguiente, egresando
únicamente acá una promoción: la de 1890.
A partir del 1º de enero de 1891, fue
suprimida la Ayudantía Marítima del Puerto de Diamante, quedando las funciones
de control a cargo del Jefe del Resguardo Nacional del Puerto. (36)
La necesidad de contar con un muelle,
siguió siendo motivo de gestiones. El 24 de mayo de 1891, en la sesión del Honorable
Concejo Deliberante, se autorizó al Presidente Municipal de Diamante, a
procurar lo necesario para la construcción de un muelle de carga y descarga
ordinaria de buques y tráfico de pasajeros por este Pueblo. (37)
Este, con fecha 16 de junio de 1891, se
dirigió al ministro de gobierno Leonidas Echagüe realizando gestiones para que
el Gobierno Provincial apoye esa construcción (38), ya que se
disponía de un proyecto de Pascual Omarini de la ciudad de Rosario. Consistía
de un muelle de 20 metros de largo por 12 metros de ancho,
sostenido por 30 pilotes. Esto quedó en la nada. (39)
También por decreto de setiembre de
1892, se acordó la autorización a Floriano Crespo y Cía. a construir un muelle
de 120 metros
de largo, pero esta obra tampoco se realizó por las dificultades técnicas
encontradas.
El 18 de agosto de 1894, el presidente
de la comisión de puentes y caminos del departamento, don Antonio Taquela le
manifestó por carta al gobernador Sabá Z. Hernández: "Aparte de la vía férrea que con tanta urgencia reclama el tráfico
público, observamos que será probablemente un hecho la construcción de un
muelle en nuestro puerto". También
agregaba: “Nos permitimos rogarle quiera
activar lo más posible los trabajos para la más pronta construcción de nuestro
muelle a fin de poder utilizarlo en la próxima cosecha". (40)
A nivel nacional, se retomó la idea de
construcción, acordada en la Ley Nº 2401 del año 1888. Se otorgó la obra, pero
el 11 de setiembre
de 1898, fue noticia periodística en el diario La Nación de Buenos
Aires: “El Gobierno ha resuelto rescindir
el contrato celebrado con los señores Oudkerk y Goode, para la construcción del
muelle proyectado en la ciudad de Diamante, acordándoles como indemnización la
cantidad de $ 8.000.-“
Pero la necesidad del muelle era
urticante, y dejemos que un párrafo de
la Memoria del Ministerio de
Obras Públicas de la Nación para 1899-1900 - 1º Semestre 1901, publicado en
Buenos Aires, nos relate la situación: "Como
lo manifesté a V. H. en la memoria anterior, faltando fondos para hacer el
muelle del Diamante, se sacó a licitación esta obra y los accesorios sobre la
base de la explotación del Puerto, de acuerdo con la autorización general dada
por Ley Nº 2401.
La
licitación tuvo lugar el 25 de julio de 1899 y la propuesta de Enrique
Casteigneaux, quien pedía la concesión por el término de 11 años, resultó la
más conveniente. Por decreto de fecha agosto 26 de 1899, se aceptó dicha
propuesta y con fecha noviembre 13 del mismo año se firmó el contrato
respectivo.
Practicando
el replanteo de las obras, se han ejecutado
los trabajos bajo la vigilancia de un inspector permanente, nombrado por
el P. E. , y pagado por el empresario, quien remite el valor del sueldo
trimestralmente a la tesorería del Ministerio.
Las
obras empezadas en el mes de junio de 1900, terminaron el 31 de diciembre del
mismo año, habiéndose construido de acuerdo con los planos y pliegos de
condiciones, menos la parte inferior del muelle, que sólo en tiempo de bajante
puede colocarse, por cuya causa se autorizó por decreto de enero 28 de 1901, la
habilitación del muelle provisionalmente y bajo la responsabilidad de los
empresarios.
Además
del muelle los empresarios construyeron sobre pilotes un galpón para depósito,
de 12 por 36 metros
y un terraplén de acceso que se aprobó por el mismo decreto referido.
Por
dificultades, ajenas a la acción del M.O.P. ese contrato no se ha cumplido por
parte del Gobierno, pues desde abril, no ha sido posible al empresario cobrar
por el uso de los muelles, ni tampoco obtener el cierre de los embarcaderos
vecinos, conforme a las estipulaciones de aquel; pero espero que pronto las
dificultades surgidas desaparecerán y que dichas obras podrán explotarse
tranquilamente en beneficio de los intereses generales y de los del fisco”.
Por ley de Presupuesto para el año 1899
se dispuso el funcionamiento en Diamante como Subprefectura de 4ª Categoría y
el 10 de febrero de
1899 se nombró por decreto el personal. (41)
El 27 de enero de 1900, por decreto del
Poder Ejecutivo Nacional, se decidió que la Prefectura General de Puertos
pasara a depender del Ministerio de Hacienda y asumiera las funciones de los
Resguardos aduaneros de todos los puertos del país, pasando a denominarse
Prefectura General de Puertos y Resguardos. (42)
Durante 1901 se comenzó la construcción
de un depósito para cereales, que se terminó en noviembre, además también de un
local destinado para Resguardo.
El 12 de noviembre de 1902, el diario
“La Nación” de Buenos Aires informaba sobre la inspección del Ing. Carmona al
Puerto del Diamante y relativo a una propuesta de expropiación: “El Ministro de Hacienda tiene en su poder,
el informe del ingeniero Carmona, sobre el estado del puerto del Diamante y las
causas que han impedido a la empresa explotadora librar al servicio público
esta obra.
El
ingeniero Carmona, que se trasladó a dicho puerto, ha comprobado que las
construcciones están en buen estado, siendo muy pocos los perjuicios sufridos
por el último ciclón.
En
cuanto a la expropiación del puerto, se reconoce que la empresa ha sido
contrariada por las autoridades del Ministerio de Hacienda, las que obedeciendo
órdenes superiores, no le respetaban el derecho de tener jurisdicción sobre 40 Km. de ribera.
El
contrato de la empresa, firmado al Ministerio de Obras Públicas, así lo
establecía.
En tal
virtud, el señor Carmona manifiesta que sería un perjuicio para el comercio del
Diamante, obligado a servirse de los muelles de la empresa, pero como ésta ha
adquirido un derecho, opina que la mejor solución es expropiar la obra.
Con
tal objeto, la empresa ha hecho proposiciones al señor Carmona, que éste ha
trasmitido al Ministro de Hacienda.
Cualquiera sea la solución, el gobierno
debe impedir que llegue la época de exportación de cereales, sin que se haya
habilitado el puerto.
Este diario, siguió las alternativas, y
en la edición del 16
de enero de 1903, señaló: “Varios
vecinos caracterizados se han dirigido al presidente de la República,
pidiéndole interponga su influencia ante el Ministro de Hacienda, a fin se
habilite el muelle de esta localidad, que tanta falta hace para el embarque de
cereales.”
Esto llevó a que el 3 de febrero, se
suscribiera entre el Ministro de Hacienda y los concesionarios del muelle del
Diamante, el contrato de expropiación de esta obra, de acuerdo con la tasación
hecha por los ingenieros Lange y Carmona.
La expropiación se convino
Ad-referéndum quedando expeditada a la aprobación del Congreso, y mientras
tanto el Gobierno tomó a su cargo la obra y la libró al servicio público
inmediatamente.
El 21 de ese mes, por Ley Nº 4264, el
Senado y Cámara de Diputados aprobaron Ad-referéndum el contrato celebrado el 3
de febrero. (43)
En 1904, un grupo de funcionarios,
industriales y comerciantes locales, entre los que se encontraban Antonio
Taquela, Antonio Casinelli, Guillermo Mayer, Martín Halliburton, Crescencio
Enrique, Miguel Santillana, Esteban Malespina, Robledo Hnos., Airaldi Hnos.,
Salvador Espona, etc., elevaron una solicitud al Ministerio de Obras Públicas,
para la construcción de dos planchadas, al Norte y Sur del muelle existente,
construido por el empresario Casteignau, “debido
a que los trasatlánticos no podían atracar sin obstruir el tráfico de los
vapores de pasajeros”. A causa de este pedido, se construyó durante 1905
solamente un muro de contención y terraplenes por razones económicas.
En la edición del 9 de diciembre de 1905 del
diario "La Libertad” de Paraná, fue publicado un artículo que nos recrea
lo que era el puerto: “Juicio de un
viajero - Después de navegar un día y dos noches, se llega al Puerto del
Diamante, se atraca a su cómodo muelle,
ahora algo obstruido por estar a su costado a pique el vapor "Iris"
que será puesto a flote esta semana. El muelle es muy cómodo, ya se nota que es
chico para el creciente movimiento comercial de ese puerto, "el mejor del
Río Paraná", pues al lado del muelle, tienen las aguas 35 pies de profundidad y
hay espacio de sobra para que los grandes buques de ultramar maniobren y
esperen turno para atracar y hacer sus operaciones en el mismo.
Muy
probablemente el Gobierno Nacional tendrá que ampliar el muelle y construir
galpones, que ahora no tienen para el almacenaje de las mercaderías, el cual
diariamente presenta el aspecto de un gran mercado.”
Durante 1907, el 13 de junio, fue
noticia periodística: “Es esperado en
Diamante el ingeniero S. Chamorro que va a dirigir las obras de reparación del
terraplén de acceso al muelle de aquella ciudad.” (44)
El 12 de setiembre de 1911, fue
publicado en el Boletín Oficial, la Ley Nº 6341 autorizando a llevar a cabo las
obras de construcción de dos galpones de 80 metros de largo por 21 metros de ancho y un
terraplén a cargo de la empresa Ferrocarril del Este.
La instalación del ferrocarril,
producto del proyecto elevado en 1905 por el Poder Ejecutivo Nacional a las
Cámaras del Congreso, para la construcción de una línea férrea del Diamante a
Curuzú Cuatiá, que fue resuelto favorablemente a través de la Ley Nº 4484, por lo cual “una vasta zona agrícola-ganadera, cuyo desarrollo industrial va a
impulsar esta futura línea", al decir del periódico de la época “La
Libertad” de Paraná, en su Nº 3114.
Con respecto a esta obra, que sería de
gran importancia, entre otras cosas, para el posterior desarrollo del puerto,
el Poder Ejecutivo de la Nación autoriza a emitir 5.500.000 pesos oro en
Títulos de la Deuda Externa, de 4 %, para dar cumplimiento a la ley que
autoriza la línea férrea de Diamante a la Estación Crespo y de la Estación
Hasenkamp, siendo las empresas contratistas The Entre Ríos Railways Company
Ltd. y la Cía. del Ferrocarril Nordeste Argentino. (45)
En enero de 1910, en el vapor
"Villa Encarnación" llegó a Diamante el primer cargamento de útiles y
materiales destinados al ferrocarril, y en febrero se inauguraron las obras,
terminándose en enero del año siguiente, los 35 Km. de extensión hasta
Estación Crespo.
A pedido del Director General de
Ferrocarriles de la Nación, ingeniero Emilio Shichedante, la Comisión del
Paraná Inferior del M.O.P. realizó los estudios y elevó el proyecto de tipos de
defensa de costas, ubicación de dolphines, etc., no teniéndose en cuenta la
zona del terraplén que ya estaba siendo ejecutada por FF.CC. Como inspector de
la obra fue designado el ingeniero Humberto Gamberales, la empresa que proveyó
los materiales para la construcción de los dolphines fue Madoery, y la firma
Venturini y Buchieri, intervinieron en la instalación de los galpones de
exportación. (46)
El 22 de enero de 1912, “El Tribuno” de
Paraná anunció: - "Vías Férreas
Entrerrianas - Comunican del Ministerio de Obras Públicas que la Sección
Diamante-Crespo de la línea Diamante-Curuzú Cuatiá, el movimiento de tierra, la
enrieladura y el telégrafo llegaron al Km 35. Se han construido 32
alcantarillas, 11 puentes y 24 edificios.
Trabajan 247 hombres.
En el Puerto Diamante están a punto de terminarse los
galpones y la explanada en ejecución."
En enero, el M.O.P. aprobó con carácter
definitivo, el trazado de la línea de la ribera frente a Diamante, desde la
Ensenada hasta el Puerto Viejo, de acuerdo a los estudios practicados por la
Dirección General de Obras Hidráulicas, a los efectos de la expropiación de los
terrenos para la construcción de las obras del Puerto Diamante. (47)
Durante 1912 se construyeron dolphines,
que se finalizaron en el mes de noviembre, mientras que en enero del año
siguiente se finalizó la construcción del galpón destinado a exportación,
autorizándose su habilitación al servicio público con carácter provisorio. Este
galpón estaba constituido por cinco cuerpos, con sus correspondientes techos a
dos aguas.
Visto los numerosos problemas que
sufrían las instalaciones a causa del movimiento del suelo y desmoronamiento de
la barranca, en noviembre de 1917 se realizaron trabajos de reparación de los
dolphines, defensa de costa y del galpón de exportación, detrás del cual se
encontraba el trazado de la bajada para los carros. Estos trabajos se
terminaron en febrero del año siguiente, firmándose un acta de entrega y
recepción por parte de la Dirección General de Obras Hidráulicas, en la persona
del ingeniero José Repossini, y del jefe de la Subprefectura del Diamante, subprefecto
José Fontán. (48)
Durante 1918, se dio un gran paso para
el desarrollo del puerto, al habilitarse el tráfico ferroviario hasta el mismo,
ya que entre 1914 y ese año, los trenes sólo llegaban hasta Estación Strobel.
Cuatro años más tarde, el Poder
Ejecutivo Nacional aprobó un proyecto de construcción de un galpón de
mampostería, con destino a almacenamiento de cereales, con una superficie de 20 x 75 metros.
Ese mismo año se comenzaron las obras, terminándose en mayo de 1919,
accediéndose al mismo para las operaciones de carga por medio de un muelle de
planchada, construido con madera dura, con un ancho de pasarela de tres metros,
realizado por la Administración local del M.O.P. y pagado por Ferrocarriles del
Este. (49)
Durante 1922, se realizaron defensas,
utilizándose gran cantidad de piedra, gran parte de la cual se trajo desde el
Uruguay. (50)
A fines de 1924, se firmó el decreto
por el cual se aprobó la construcción de cuatro galpones de mampostería de 20 x 75 metros,
con una distancia entre cada uno de 35 metros, proyectándose la instalación de
cintas transportadoras en los galpones Nº 1 y 2. El muelle de la zona de
exportación medía 530
metros, mientras que al año siguiente, se aprobó la
construcción del galpón, desvíos, calles de piedra, vías del ferrocarril y
casillas para oficinas.
Por Decreto del 16 de diciembre de 1927 se
decidió la construcción del muelle de exportación de 410 metros de largo, y
al otro año, se autorizó el de cemento
armado de 200 metros
de longitud.
Años más tarde, a principios de 1936,
el Ministro del Interior Dr. Leopoldo Melo hizo conocer al Gobernador de la
Provincia Dr. Eduardo Tibiletti, un memorándum explicativo de las importantes
obras a realizarse en los puertos de nuestra ciudad y Victoria.
En el referido memorándum encontramos
los siguientes datos sobre las obras en nuestro puerto: por Decreto 74567, se
aprobó a los efectos de la Ley 10285, el proyecto de presupuesto de $726.400
moneda nacional preparado por el Director General de Navegación y Puertos para
la ejecución de diversos trabajos de pavimentación de calles y plazoletas en el
puerto de Diamante. (51)
El 12 de noviembre de 1936, se inauguró
un muelle de hormigón armado de 150
m. de frente, de acuerdo con el proyecto aprobado el 6 de febrero de 1936;
y, un galpón de 15x50 m. frente al extremo de aguas abajo del muelle de
importación, construido según el proyecto aprobado por decreto del 31 de diciembre de 1934.
(52)
El jefe de la Subprefectura local,
escribió en la Memoria Anual de la dependencia correspondiente a 1938: “El Ministerio de Obras Públicas prosigue la
construcción de pavimentación de calles de acceso a la jurisdicción portuaria,
como así veredas y explanadas, habiéndose habilitado la bajada del puerto que
era de imperiosa necesidad “. (53)
Durante diciembre de 1942 se dio
término a la construcción de una muralla de cemento armado, levantada en el
extremo norte de la zona portuaria (Balneario Municipal) a los efectos de
contener las aguas del Río Paraná, y se instaló un guinche eléctrico ubicado en
el muelle nacional, que en poco tiempo se lo puso en funcionamiento. (54)
En 1944 se construyó un tramo de 150 m. de calle adoquinada
frente a los muelles, suspendiéndose su continuación por impedirlo la Estación
Diamante de los Ferrocarriles del Estado. Esa construcción de la calle fue
ejecutada al nivel de los muelles, por lo que se rebajó el nivel existente en
más de un metro, siendo necesario construir un muro de contención para evitar
que se resientan los edificios al minarse las proximidades de sus cimientos. El
muro fue ejecutado en hormigón armado, habiéndose colocado una baranda de
hierro y madera y tres escaleras para bajar a la calle”. (55)
Por Ley Nº 12.913/46 se dispuso que la
Gendarmería Nacional asumiera funciones de Policía de Seguridad y Judicial en
todos los puertos del país. En cumplimiento de ello, esta fuerza se hizo cargo
del Puerto de Diamante, quedando la Subprefectura a cargo de la seguridad de la
navegación exclusivamente. Esta situación subsistió hasta el 5 de diciembre de 1950, en
que se dispuso que se restituyera a la Prefectura Nacional Marítima las
funciones de policía de seguridad y judicial. Asimismo se cambió la
denominación por Prefectura Nacional Marítima. (56)
El 30 de enero de 1951, se confeccionó
el Acta de entrega de la División Paraná Medio, de la Dirección Nacional de
Construcciones Portuarias y Vías Navegables, del Ministerio de Obras Públicas
de la Nación representado por el Ing. Carlos Lavagna a la Municipalidad de la
Ciudad, en la persona de su intendente Ernesto M. Airaldi de las obras de
acceso al puerto local, construidas por esa entidad.
Esas obras comprendían: el afirmado de
la calle de acceso, desde la intersección de las calles Colón y Paraná (actual
Sabá Hernández), hasta su terminación provisoria próxima a la zona portuaria y
toda la instalación eléctrica destinada a su alumbrado, así como también un
ramal que se desarrolló sobre el tramo final de la antigua bajada. (57)
Durante 1960, el personal de la
Subprefectura donó una imagen de la Virgen "Stella Maris", Patrona de
la Institución, que fue entronizada el día 29 de octubre, Día de la
Prefectura, en la plazoleta adjunta a
esa Institución. (Se trató de la que hoy se encuentra ubicada en la actual
sede). Para esa ocasión, por Ordenanza Nº 41/60, el H.C.D. autorizó al
Departamento Ejecutivo a donar a la Subprefectura Puerto Diamante un mástil con
su correspondiente pedestal, que fue erigido en la misma plazoleta(58);
también el Regimiento 3 de Artillería con asiento en ese momento en la
localidad, donó una bandera para ese mástil.
El 13 de enero de 1966, se aprobó la
licitación para un elevador de granos en Puerto Diamante. El Secretario de
Obras Públicas, doctor Miguel Ángel Martínez, aprobó el proyecto y
documentación preparados por la Dirección Nacional de Construcción de
Elevadores de Granos, y autorizó el llamado a licitación pública para
construirlo, con una capacidad de almacenamiento de 19.000 toneladas e
instalaciones electromecánicas para recibir por vagones y camiones como mínimo
4.500 toneladas por día, con posibilidad de cargar barcos de ultramar a razón
de mil toneladas por hora. Además, un muelle de atraque de hormigón armado de 170 metros de largo, con
una galería de embarque equipada con cintas, instalaciones y caños telescópicos
de carga a bodega y diversos edificios auxiliares, pavimentación, desvío
ferroviario y obras de sistematización. (59)
El periódico “La Mañana” de la ciudad
entrerriana de Victoria, anunció en su primera página de la edición del 24 de mayo de 1966: “Se adjudicaron los Elevadores de Granos en Puerto Diamante. Una
noticia que ha repercutido profunda y satisfactoriamente en nuestro medio, es
sin duda la adjudicación a la firma Sideco Silos Demaco S.A. en $ 475.432.725
la construcción de los elevadores de granos en Puerto Diamante”; y en otro
párrafo el artículo dice: “Sin lugar a
dudas, es honrado y legítimo adjudicar a un hijo de Diamante, integrante como
Vocal del Directorio de la Junta Nacional de Granos y Elevadores don Miguel
Parente, su gestión tan eficaz como feliz”.
En agosto de 1966, se comenzó la
construcción de los silos y el edificio, que se inauguraron oficialmente el 19 de diciembre de 1970.
(60)
A partir de noviembre de 1977,
empezaron a notarse movimientos de barrancas, lo que se hizo evidente por
grietas en los edificios ubicados en el lugar. Pero en marzo de 1978, se
registró uno de mayor intensidad, que provocó el deterioro de esos edificios y
calle de acceso. (61)
Entre los efectos producidos, que fue
informado el 27
de mayo de 1978 por el periódico “Comunidad” editado por la
parroquia de Diamante, en su Nº 242, figuraron la clausura de la avenida
Libertador, arteria obligada para llegar al puerto por haber quedado
inutilizada; el desplazamiento de cimientos y agrietamiento de paredes de
viviendas; en las inmediaciones de las instalaciones de la Junta Nacional de
Granos, el avance de la tierra arcillosa cubrió 800 m² sobre el camino de
salida de los camiones, motivando la clausura de la balanza electrónica; para
paliar la situación, se resolvió habilitar el camino en construcción, de acceso
a la localidad de Strobel, que también resultó dañado por las lluvias, a fin de
acortar la distancia para llegar al puerto. Felizmente se logra continuar con
la actividad portuaria, habiendo llegado buques de gran calado.
El 14 de abril de 1979, por Ordenanza Nº
115/79 se prohibió el realojamiento de pobladores en la zona de Puerto Nuevo.
Desde este momento, la Subprefectura de Diamante dejó de tener su sede central
en la zona portuaria, para ubicarse en la planta urbana de la ciudad. También
en poco tiempo, terminaron las actividades ferroviarias en el puerto.
A partir de estos hechos, el puerto
adquirió otra fisonomía, ya no propia de sus mejores tiempos y durante varios
años quedó aletargado.
El lento pero progresivo resurgimiento
de las actividades portuarias se produjeron a través de varias etapas.
El 7 de diciembre de 1991, se firmó el
traspaso a la Provincia por parte de la Gobierno Nacional de la administración
de los puertos de Diamante, Concepción del Uruguay e Ibicuy, conformándose el
Instituto Fluvio Portuario Provincial (I.F.P.P.).
El 27 de febrero de 1992, por Decreto Nº
351 se privatizaron las instalaciones de la Junta Nacional de Granos, es decir
los silos, edificio y muelle.
En mayo de 1993, al Instituto Fluvio
Portuario Provincial le quedó el viejo muelle Nacional y los viejos galpones.
A fines de 1994, con la sanción de la
Ley provincial Nº 8900, comenzó el proceso de transformación de la estructura
administrativa de los puertos entrerrianos; y luego por Ley Nº 8911,
complementaria a la anterior, facilitó la conformación de la administración de
cada puerto. Su reglamentación se firmó el 6 de setiembre de 1995. Luego, a
través del Decreto Nº 4300 se nombraron las autoridades del Consejo Directivo
Provincial, poniendo en funciones por el mismo a los Presidentes de cada uno de
los entes. También en cada puerto, la Provincia nombró un representante del
Instituto Portuario Provincial de Entre Ríos (I.P.P.E.R.), nombre con que fue
bautizada la entidad.
El 2 de noviembre de 1995, en una
reunión mantenida en la administración del puerto, representantes de entes
oficiales y privados echaron las bases para conformar el manejo autárquico del
mismo. Se integró el nuevo Ente Autárquico Puerto Diamante, con la presidencia
del Consejo, quien cumpliría funciones de Administrador del Puerto, y cuatro
Vocales, uno en representación del I.P.P.E.R., uno del Municipio, otro
representando a los Exportadores y el último a los prestadores de servicio
La firma propietaria de las ex instalaciones
de la Junta Nacional de Granos, alcanzó en el período 96/97 su máximo volumen
de exportación de granos, llegando a exportar, en trigo el 50 % de lo producido
en la Provincia, es decir 250.000 toneladas. También han incrementado la
capacidad de almacenaje, pasando de 20.000 toneladas a 60.000, a través de la construcción de 3 silos
de 8.5000 toneladas y 1 silo de 4.0000, interconectados al elevador principal,
una nueva plataforma de carga de 20
m. de largo y hasta 80 toneladas de capacidad, pavimento
e informatización. Se redujo el tiempo de descarga de 90 camiones de 24 a 6 horas.
En mayo de 1997, la Cámara de Diputados
de la Provincia transformó en Ley, el proyecto que autorizaba al Poder
Ejecutivo a suscribir un convenio con la Nación para recibir un crédito del
Banco Nación para llevar adelante varias obras. La iniciativa fue presentada
por los senadores Mario Yedro y Humberto Ré, entre las que se contempla la
estabilización de las barrancas de Diamante.
Son 150 años de historia del puerto de
Diamante y de la actuación de la Subprefectura de la localidad, historias con
un pasado común, y he querido en este trabajo
evocar algunos de sus hitos más sobresalientes, que dan la idea de su
pasado y su presente.
Diamante 1998
REFERENCIAS:
Siglas
usadas:
A.G.P.E.R.
- Archivo General de la Provincia de Entre Ríos
M.O.P.
- Ministerio de Obras Públicas.
H.C.D.
- Honorable Concejo Deliberante
(1)
Gobierno - Serie IX- Mazo 2 - Leg. 5 - A.G.P.E.R.
(2)
Recopilación de Leyes y Decretos de Entre Ríos -Tomo 5 - Pág. 271 - A.G.P.E.R.
(3)
Gobierno - Carpeta 2 - Leg. 7 - Año 1848 - A.G.P.E.R.
(4) El
Federal Entre-Riano - Nº 249-Carp. - Leg. 1849 - Hemeroteca Museo
Leguizamón-Fondo Martínez - Pná
(5)
Gobierno - Serie II - Carpeta 2 - A.G.P.E.R.
(6)
Hacienda - Serie II - Subserie I - Carpeta 1 - Leg. 1 - A.G.P.E.R.
(7)
Hacienda - Serie II - Subserie I - Carpeta 1 - Leg. 1 - A.G.P.E.R.
(8)
Hacienda - Serie II - Subserie I-CARP. 1-LEG. 3-A.G.P.E.R.)
(9) Hacienda - Serie II - Subserie
I-CARP. 1-LEG. 1-A.G.P.E.R.
(10) Hacienda
- Serie VII- Subserie I - Diamante - Carpeta 1 Legajo 5 - A.G.P.E.R..
(11
Hacienda - Serie II - Subserie I-Carpeta 1-LEG. 3-A.G.P.E.R.
(12)
Hacienda Serie II - Carpeta 1 - Leg. 7 -
A.G.P.E.R.
(13) Div. Gobierno - Serie I - Carpeta
31 - Leg. 12 - A.G.P.E.R.
(14)
Hacienda Serie II - Carpeta II - Legajo 4- A.G.P.E.R.
(15)
Reglamento para el orden económico para la Provincia de Entre Ríos (1820-1821)
transcripto en la Obra de Aníbal Vázquez - La República de Entre Ríos y en la
Obra Historia Económica y Social de Entre Ríos de Oscar Urquiza Almandoz página
223/224. Reglamento de los Puertos de Entre Ríos, año 1832 - Recopilación de
Leyes - Decretos y Acuerdos de la Provincia de Entre Ríos Tomo III pagina 414 y
siguientes - Biblioteca Palacio San José (E.Ríos). Decreto del 10-11-1863 -
Registro Nacional República Argentina año 1863 - Biblioteca del Archivo Gral.
de Nación.
(16)
Div. Hacienda - Serie II - Carpeta 4 - Leg. 3 - A.G.P.E.R.
(17)
Div. Hacienda - Serie II - Subserie I -
Carpeta 3 - Leg. 1 - A.G.P.E.R.
(18)
Div. Hacienda - Serie II - Carpeta 3 - Legajo 1 - A.G.P.E.R.
(19)
Div. Hacienda - Serie II - Subserie I - Carpeta
4 - Leg. 1 - A.G.P.E.R.
(20) Idem.
(21)
Idem.
(22)
Div. Hacienda - Serie II - Subserie I - Carpeta
4 - Leg. 11 - A.G.P.E.R.
(23)
Recopilación de Leyes, Decretos y Acuerdos de Entre Ríos - Tomo VI-Pág. 412
(24)
Div. Hacienda - Serie XII - D - Carpeta
6 - Jefatura Diamante - Leg. 1 - A.G.P.E.R.
(25)
Investigación Andrés Rene Rousseaux.
(26)
Idem.
(27)
Investigación Humberto Brumatti.
(28)
Diario Sesiones Cámara de Senadores - Pág. 835 - Buenos Aires.
(29)
La Opinión de Entre Ríos - Nº 937 -
Carpeta II - Leg. II - Hemeroteca Museo Leguizamón-Fondo B.T. Martínez -
Paraná.
(30)
Diario de Sesiones - Cámara de Senadores - Pág. 1168 - Congreso Nacional.
(31)
Diario “La Prensa”- Buenos Aires.
(32)
Párrafo Memorias del Jefe Político del Departamento - Año 1866 - Div. Gobierno
- Serie XII - Nº 2 - Diamante - A.G.P.E.R.
(33)
Actas de Sesiones H.C.D. - Libro 2-Folios 252/254 - Municipalidad de Diamante.
(34)
Actas de Sesiones H.C.D. - Libro 2 - Folio 339 - Municipalidad de Diamante.
(35)
Actas de Sesiones H.C.D. - Libro 2-Folios 286/289 - Municipalidad de Diamante.
(36)
Investigación Andrés Rene Rousseaux.
(37)
Libro de Decretos y Ordenanzas Años 1877 a 1892 - Folio 184 - Municipalidad de
Diamante.
(38) Paquete Nº 166 - Legajo Año 1891 -
Archivo Municipalidad de Diamante.
(39)
Actas de Sesiones H.C.D. - Libro 3 - Folio 122 - Archivo Municipalidad de
Diamante.
(40)
Div. Gobierno - Serie XV - Carpeta 3 -Año 1894 - Diamante - A.G.P.E.R.
(41)
Investigación Andrés Rene Rousseaux.
(42)
Idem.
(43)
Leyes Nacionales - Tomo XIII - Buenos Aires - Año 1918.
(44)
Periódico El Censor - Gualeguaychú - E.R. - Investigación Humberto Brumatti.
(45)
Idem.
(46)
Trabajo Puerto Diamante - Dpto. Distrito Paraná Medio - M.O.P. - Año 1986.
(47)
Diario El Tribuno - Paraná - Nº 1942 - Pág. 4 - A.G.P.E.R.
(48)
Trabajo Puerto Diamante - Dpto. Distrito Paraná Medio - M.O.P. - Año 1986.
(49)
Idem.
(50)
Trabajo Puerto Diamante - Dpto. Distrito Paraná Medio - M.O.P. - Año 1986.
(51)
Periódico Crónica Nº 193 - Diamante - Biblioteca Popular Diamante.
(52)
Periódico Crónica Nº 301 - Diamante - Biblioteca Popular Diamante.
(53)
Memorias Subprefectura Diamante - Año 1938.
(54)
Memorias Subprefectura Diamante - Año 1942.
(55)
Memorias Subprefectura Diamante - Año 1944.
(56)
Investigación Andrés Rene Rousseaux.
(57)
Archivo Municipalidad de Diamante.
(58)
Actas de Sesiones H.C.D. - Libro 15 - Folio 254 - Municipalidad de Diamante.
(59) Diario
La Prensa - Buenos Aires - Edición de la fecha.
(60)
Revista VER Nº 35 - Publicación Oficial del Gobierno de E.R.
(61)
Archivo Municipalidad de Diamante.
